Fajitas o tacos de soya, y homenaje a los Soprano

Esta receta es deliciosa. La creó un joven chef que trabaja en HEB Humberto Lobo. Es una buena forma de aumentar la soya en la dieta.

Salsa:
11 cucharadas de salsa de soya, reducida en sodio
3 cucharadas salsa inglesa
1 cucharada humo líquido (un saborizante en botella)
1 cucharada miel de abeja

Tacos
Cebolla rebanada
Pimientos verde y morrón rebanados
Ajo picado
Jitomate finamente picado
Comino tostado y molido en molcajete
Aceite de oliva
Carne de soya (se encuentra en la sección refrigerada de carnes de HEB) sin sabor, de preferencia, aunque casi todas las marcas sirven. La carne de soya viene como carne picada o fajitas.

Mezclar los ingredientes de la salsa.
En el aceite, sofreír la cebolla, ajo y pimientos. Agregar el comino, la carne de soya, y el jitomate. Cocinar a fuego lento hasta que se deshaga el jitomate y se mezclen los sabores. Agregar suficiente salsa para saborizar el platillo: agregue la cuarta parte de la salsa y probar para checar lo fuerte del sabor. Seguir agregando hasta conseguir el grado de sabor deseado. Si se desea, salpimentar ligeramente.

Se sirve con lechuga picada, aguacate picado, cebolla picada, y tortillas recién hechas.


Homenaje a los Soprano: Cannoli a la Mafia, estilo Nueva York.
Esta receta es un manjar, pero la pasta es difícil de hacer sin máquina para hacer pastas italianas. Si lo intenta a mano con rodillo, asegúrese de que la pasta quede tan delgada como un papel grueso.

Se necesitan ocho tubos para hacer cannoli (les digo, esta receta es para los verdaderos fanáticos de la comida italiana!), aceitados.
El relleno
1 recipiente de queso mascarpone (viene en una tinita de plástico)
medio recipiente de queso crema Filadelfia light
3/4 de taza de azúcar glass
1/2 cucharadita vainilla
1/4 cucharadita canela
1/2 onza de chocolate semiamargo picado (compren chispas de chocolate)
ralladura de cáscara de naranja
Mezclar bien y guardar en el refrigerador hasta que estén los cannoli.

Las pastas
1 taza harina
1/2 cucharada azúcar
1/2 cucharadita cocoa en polvo
1/4 cucharadita canela
1/4 cucharadita sal
1 1/2 cucharada aceite vegetal
1/4 taza de vino blanco seco
Mezclar los ingredientes bien, agregando vino hasta conseguir una pasta suave pero que se adhiere bien. Amasar brevemente, unos dos minutos, hasta que esté lisa y bien mezclada. Dejar reposar en un film de plástico cuando menos 30 minutos.

Calentar aceite vegetal a 185 grados C., con una profundidad de dos pulgadas.
Cortar la masa en cuatro pedazos, y comenzando con la mayor anchura de la máquina de pasta, meter un pedazo. Vaya reduciendo la anchura con cada pasada hasta conseguir que la pasta esté tan delgada que la mano se trasluce através de la misma. Si lo hace a mano, cortar la masa en ocho pedazos y con el rodillo extienda casa pedazo hasta formar un rectángulo, pero no más largo que los tubos para cannoli.
Coloque un tubo diagonalmente sobre el rectángulo de masa y enrollar el pedazo sobre el tubo, untando con un poco de clara de huevo donde las esquinas se juntan para pegar bien. Tenga cuidado de que la clara no toque el tubo; de otra forma, se pegará el cannole al tubo.
Freír de tres o cuatro a la vez hasta que se doren y sacar a enfriar sobre una toalla de papel. Cuando los tubos pueden tocarse, deslice cada pasta para sacarla del tubo, y dejar enfriar.
Con una duya o una bolsa de plático con una esquina cortada, rellene los cannoli, espolvoree con azúcar glass y un toquecito de cocoa, y servir de inmediato.

Las pastas se pueden guardar en un recipiente hermético hasta el momento de rellenar.