Para los que ya se cansaron de ver la carita de niño pícaro de Rodrigo Medina plasmada en sendos letreros que infestan la comarca, piénsenlo de nuevo. Diversión hay por todos lados.
Con una táctica que sólo puede calificarse de genial, hay una referencia sexual interesantísima, y muy válida, en los anuncios para Medina. Su primer nombre se escribe con letras verdes, excepto la "g", que está en rojo y termina en una flecha que apunta, sugerentemente, a la "o". Símbolo tradicional, de hecho, del falo. El o la que no piense cochambrosamente al ver esta representación del falo y su destino necesita más relajación y relajo. Digo.
Ah, pero nuestros heróicos diseñadores de propaganda política no osaron ir por todo, y la flecha de Medina no entra directamente a la "o" sino la roza por un ladito. Se podría decir que lograron atraer la atención inconsciente tanto de los que quieren gritar, junto con Medina, "¡Qué macho soy!" y los que padecen de, digamos, fallas ocasionales en la puntería debido a....bueno, lo demás se lo dejo a su imaginación, que seguramente está a la altura.
miércoles, 4 de marzo de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Muy de acuerdo, será que es por eso que cada vez que veo su publicidad me emociono?....bueno me siento más tranquila de saber que mi emoción fué generada a propósito con finen mercadotecnistas. Me siento menos lujuriosa.....jejeje
Publicar un comentario